EL PROBLEMA HABITACIONAL APARECE EN LA ISLA DE LA PALMA
Mi visión generalista
Cuando conocí La Palma, hace ahora siete años, podías conseguir una vivienda de alquiler por poco más de 200 euros al mes. Para jubilados europeos, o españoles, era una opción interesante. Para los jóvenes no, no había trabajo. Aún así, había mucha vivienda vacacional, y el acceso a la misma no era uno de los factores clave para su desarrollo.
A mi modesto entender, y no soy experto en sociología ni mucho menos, dos eran los motores dela isla, el plátano y el turismo. El primero amenazado por la globalización y la competencia con la banana, y el segundo amenazado por la cada vez mayor competencia de destinos con más facilidades; los primeros y más feroces sus islas hermanas con grandes playas y complejos hoteleros, y los segundos los paises con turismo emergente como los del norte de África, e islas del mediterráneo a cientos, más cercanas a Europa y más asequibles. Aún hoy, es más económico viajar a Tenerife, a Gran canaria o a Lanzarote desde el continente, que viajar desde cualquiera de ellas a La Palma.
El Covid primero, y la erupción ahora, están incidiendo de manera notable en ambos motores, a la vez que agotando la oferta de vivienda disponible.
Como he titulado, es mi visión, y seguro muchos expertos pueden rebatirla, si me convencen la cambiaré pero de momento es la que es.
El proyecto Brisas Canarias en este contexto
Pocos días antes del volcán parecía que televisión canaria podía tener interés en el tema “cohousing”, aunque más relacionado con el tema residencias para la tercera edad. De hecho me llamaron, por error, pensando que este era un proyecto de residencia. Ahora el volcán ha absorbido toda su energía, y los ha puesto, con brillantez, todo hay que decirlo, en modo “monotema”.
También teníamos pendiente una reunión con el Ayuntamiento, para pedirles sobre todo apoyo en forma de visibilidad y de respaldo, ya que somos palmeros de reciente factura, sin arraigo, y desconocidos por este motivo, lo que unido al mismo desconocimiento general sobre este fenómeno hacía muy complicado llevarlo a buen fin. La misma falta de necesidad de viviendas era ya en sí un obstáculo a nuestro proyecto. También el volcán ha absorbido toda su atención, y esa reunión ha sido aplazada.
Pero el proyecto es ahora más necesario que nunca.
Muchas personas han perdido su hogar y necesitan rehacer su vida, y conseguir un nuevo hogar.
Muchas son las facetas que hacen del cohousing una oportunidad:
El cohousing exige un fuerte sentido comunitario, eso es cierto, pero la desgracia, como la ocurrida con la erupción de este volcán ayuda a crear sentido comunitario.
Me gustaría mencionar algunas de las ventajas de un proyecto de cohousing:
Precio asequible. A pesar del desembolso que hay que realizar para entrar en el proyecto, el cohousing tiene un precio más asequible que una vivienda convencional. Además, los gastos mensuales (lavadora, red wifi…) se reparten entre todos los miembros de esa comunidad.
Viviendas sostenibles. Una de las características que define a estos proyectos es que están diseñados para reducir el consumo energético, utilizar fuentes renovables y reutilizar los residuos. Es un modelo de vivienda eficiente y sostenible.
Evita el aislamiento social. Los cohousing senior pensados para las personas mayores consiguen evitar su aislamiento y soledad. Asimismo, contribuyen a desarrollar una vida más social y activa.
Inversión recuperable. Si algún socio quiere abandonar la cooperativa, recupera la inversión inicial y su plaza es ocupada por otro miembro. En el caso de fallecimiento, son los herederos quienes reciben la cantidad de dinero aportada por el socio.
No necesitas hipoteca. Puedes usar la casa toda la vida sin necesidad de pedir una hipoteca, lo que facilita el acceso a la vivienda a las personas que tienen menos recursos. Es la cooperativa la que pide la hipoteca, y entre todos, con nuestras cuotas, la pagamos, pero nos permite conseguir plazos que serían inviables como personas particulares, ya que la cooperativa seguirá cuando nosotros muramos.
Más barato que el alquiler. Las cuotas mensuales que pagan los socios por los gastos comunes son más bajas que la renta del alquiler y además no existe límite de tiempo, cosa que sí ocurre en el caso de los alquileres (limitados por ley a un máximo de cinco años de duración más tres de prórroga).
No obstante, el cohousing también tiene algunos aspectos negativos que también debes conocer. Entre los más destacados se encuentran los siguientes:
Tiempo de realización de los proyectos. Hasta que son una realidad, los proyectos de cohousing pueden alargarse varios años; en nuestro caso el proyecto está muy avanzado y permitirá comenzar las casas en pocos meses.
Búsqueda de financiación. A la dificultad de encontrar terrenos para construir las viviendas a un precio adecuado se unen los problemas para conseguir financiación de los bancos. En nuestro caso ya disponemos del solar y tenemos apalabrada la financiación con Cajasiete.
Pocos proyectos disponibles. Actualmente, el cohousing no está muy extendido en España, por lo que no resulta fácil encontrar iniciativas a las que adherirse. Aquí, nuestro proyecto, tiene aún plazas disponibles.
Perfil de vecinos similar. Esta fórmula residencial es colaborativa, por lo que es muy importante que antes de unirte a alguna de ellas confirmes tu afinidad personal con el resto de vecinos. Si. ese puede ser un problema, a la vez que una oportunidad para poner ganas en compartir nuestras vidas un poco y darnos cuenta de que hay que cambiar, como dicen los ingleses, el ME por el WE.
Visto esto, debemos darnos cuenta de que el COHOUSING es también la TERCERA FORMA DE ACCESO A LA VIVIENDA. No es compra, no compramos; tampoco es alquiler. La fórmula de cesión de uso nos da un hogar de por vida, que pueden heredar nuestros hijos, o recuperar la inversión, a través de una propiedad cooperativa, que nos da el derecho de uso indefinido, más económico, más social, fuera de los circuitos de la especulación del mercado.
Entonces,… se trata además de un elemento casi desconocido,.. lo que nos impide acceder a él.
Pero, ¿no es ahora precisamente, en La Palma, en este preciso momento, que deberíamos darle visibilidad y analizar esta fórmula de acceso a la vivienda?
Es tan evidente que puede parecer oportunista, pero para mi es claro, y por eso debo gritarlo.
EL PROYECTO BRISAS CANARIAS, EN BREÑA ALTA, PUEDE SER AHORA TU NUEVO HOGAR, VEN A DESARROLLARLO CON NOSOTROS